Actividad dirigida a personas con diagnóstico de Alzheimer u otra demencia en fase leve o moderada. Cuando la familia solicita el taller, se realiza una valoración inicial tras la que recibirán un informe psicosocial sobre el estado cognitivo de la persona enferma y todos los aspectos relevantes sobre ella (se realiza una valoración anual). Tras la valoración, se decide si es posible su inclusión en el taller.
La actividad se realiza en grupos pequeños en función del grado de deterioro lo que nos permite trabajar de forma homogénea considerando también la situación individual. A lo largo del año, los familiares reciben por mail “fichas de seguimiento” sobre la participación de la persona enferma y se realizarán reuniones de grupo para familias, coordinadas por una de las psicólogas del equipo de intervención. También se contempla la atención al familiar de manera individualizada cuando lo solicite.